El 21 de septiembre tendrá lugar la "http://www.nickspa.com/pagina/cursa/cursa" V Carrera Nick Sports d’Horta, dedicada en esta edición a la investigación en cáncer hepático en el Vall d’Hebron Institut de Recerca (VHIR). Su promotora, María José Moscoso, nos cuenta cómo ha pasado estos últimos 8 meses tras ser trasplantada del hígado en el Vall d’Hebron y cuáles son las principales novedades de la carrera. ¿Cómo recibiste la llamada del hospital?Como en una película… Cuando me dijeron que tenían un hígado para mí, me quedé bloqueada. Era la llamada que esperaba con ganas desde hacía meses, pero cuando me llegó, me quedé parada, fría. No me dio tiempo a pensar mucho, enseguida me duché, cogí cuatro cosas y me fui directa hacia el Vall d’Hebron. Allí me hicieron varias pruebas y el 5 de octubre me operaron. Fue todo muy rápido.¿Qué recuerdas de aquellos días? Fue una experiencia muy mental, de sensaciones extrañas. En la UCI no me enteraba de lo que me dolía, al subir a planta empecé a tener molestias y después, a sentir un gran dolor en la espalda. Aparte del dolor, me sentía como perdida, no sabía dónde estaba mi cuerpo y la medicación de rechazo me ponía muy nerviosa, me subía las pulsaciones y me producía temblores. Al principio notaba cosas raras. ¿Y cuándo dejaste de tener esas sensaciones?Cuando decidí cambiar la historia y dejar de luchar para empezar a aceptar a mi nuevo hígado. El momento más bonito que recuerdo fue cuando a los pocos días de la operación el doctor me llevó a hacerme la ecografía. Bajé llorando, porque sabía que esa prueba era clave para saber que todo iba bien. El doctor me tocó el hombro y me explicó en directo, viendo la ecografía, cómo funcionaba el órgano. Para mí fue como si me hubiera abrazado. En aquel momento me dio la seguridad que necesitaba y me quedé impresionada al ver que se había producido el milagro. Han pasado más de 8 meses desde entonces. ¿Ahora cómo estás? Ahora estoy bien. Pero he pasado momentos duros, tanto a nivel físico como psicológico. El órgano funciona perfectamente y lo único que me falla es el conducto biliar. Llevo desde hace unos meses un catéter, que me molesta un poco a la hora de hacer deporte, y dentro de unos días me pondrán una prótesis que espero que funcione. Por lo demás, hago vida normal y la gente que me conoce, pero que no sabía lo de la operación, no se cree que haya pasado por un trasplante. El 21 de septiembre quieres que todos corran por la investigación en el trasplante hepático. ¿Por qué? Siento que tengo que ayudar a todas las personas que han estado a mi lado, que han sido muchas, y de ayudar a la sanidad pública. Sé que es una operación carísima y me siento con el deber de compensar de alguna manera todo lo que los médicos han hecho para que yo esté viva y bien. Cuando te pasa algo así ves un mundo que no conocías antes y te das cuenta de que hay personas que están en una situación peor.Los beneficios de este año irán destinados al VHIR para que la investigación en el trasplante hepático ayude en la mejora de los tratamientos y en la calidad de vida de los pacientes. ¿Qué novedades tiene esta edición?Paralelamente a la carrera de 5km, tendremos una carrera especial gratuita dedicada a jóvenes, niños y niñas con síndrome de Down o con alguna otra discapacidad, y a menores de 10 años. Se incorporarán en la carrera cuando quede un quilómetro y medio.El año pasado recaudasteis cerca de 5.000 euros. Una gran aportación para la investigación en trasplantes de órganos en el Vall d’Hebron. Sí, ¡y esperamos recaudar más este año!