El año 2013 se doctoraba la primera enfermera de Vall d’Hebron, la Dra. Carmen Fuentalsaz, con una tesis que analizaba el impacto de la incontinencia urinaria en mujeres, adolescentes y deportistas de élite. Desde entonces, se han doctorado un total de once enfermeras, la última de ellas la Dra. Patricia Rubio, con una tesis sobre la Humanización de la Unidad de Cuidados intensivos Pediátricos a través de las familias. Dos más lo harán antes de que acabe el año y 27 enfermeras están trabajando para doctorarse. “Los estudios de doctorado hace pocos años estaban vinculados al campo docente donde eran una obligatoriedad. No se veía la utilidad de ser doctora en enfermería y combinarlo con la asistencia en un Hospital”, explica Esperanza Zuriguel, coordinadora de investigación e innovación en Enfermería del Hospital Universitario Vall d’Hebron y jefa de grupo de Investigación Multidisciplinario de Enfermería del Vall d’Hebron Instituto de Investigación (VHIR). “Afortunadamente, esta concepción ha cambiado y hoy en día nadie duda que obtener el nivel de doctorado permita a las enfermeras desarrollo y autonomía profesional y aportar valor clínico a la cura de los pacientes”, añade Esperanza Zuriguel.

En el Día Mundial de la Enfermería, el aumento de enfermeras doctoradas de Vall d’Hebron es un ejemplo más de cómo esta profesión ha avanzado y cada vez las enfermeras adquieren más competencias que tienen un impacto directo en la mejora de los resultados en salud de los y las pacientes. Otra muestra es el aumento de las enfermeras quirúrgicas, cada vez con un mayor grado de formación y especialización. Un total de 229 enfermeras quirúrgicas trabajan en los diferentes Bloques Quirúrgicos de Vall d’Hebron: 82 en el Hospital General, 53 en el Hospital de Traumatología, Rehabilitación y Quemados, 54 en el Hospital Infantil y de la Mujer y 40 enfermeras de Cirugía Mayor Ambulatoria en el Pere Virgili.

“Las enfermeras quirúrgicas se especializan después de cursar una maestría o posgrado en Enfermería Quirúrgica, una vez diplomadas. Cuando lo superan, en Vall d’Hebron les hacemos un programa de acogida, adaptación y formación. Este itinerario formativo varía según el bloque quirúrgico donde están destinadas. Gracias a él acaban de adquirir los conocimientos prácticos que necesitarán para el desarrollo de su trabajo”, expone Carolina Gómez, adjunta a la Dirección de Enfermería de Atención en el paciente quirúrgico.

Aparte de la formación, ciertas cualidades son imprescindibles en una enfermera quirúrgica, como por ejemplo ser una persona capaz de mantener la concentración y la calma en momentos de mucha presión, reaccionar con rapidez y de manera inmediata y a la vegada ser una persona metódica y organizada, así como contar con equilibrio emocional y mental para hacer frente a situaciones de emergencia y tener capacidad de trabajo en equipo.

Entre los conocimientos que adquieren las enfermeras quirúrgicas destacan los principios de seguridad, que incluyen la ergonomía, la movilización y manejo del paciente, el control de la infección y los procedimientos de reanimación, la utilización de diferentes instrumentos médicos y quirúrgicos. Vall d’Hebron cuenta con más de cincuenta especialidades en los diferentes Bloques Quirúrgicos, como por ejemplo Neurocirugía, Cirugía cardíaca, Microcirugía y Neuroortopedia, Cirugía ginecológica, Cirugía neonatal y fetal y Patología de la rodilla, para poner solo algunos ejemplos. Además, en el Programa de Trasplante de Órganos donde participan tres equipos de enfermería quirúrgica que están de guardia las 24 horas cada día del año y están formadas con especialidades quirúrgicas de complejidad como la cirugía torácica, cirugía cardíaca, cirugía hepática y cirugía renal, incluida la pediátrica. También el equipo experto en lesiones medulares que operan lesionados agudos todos los días del año dispone de un equipo de enfermería de guardia por las intervenciones quirúrgicas urgentes.

“Tanto las enfermeras doctoradas de Vall d’Hebron como las enfermeras quirúrgicas son exponente de la cada vez mayor especialización y calificación que se requiere para ejercer una profesión donde la formación continua es indispensable”, expone destaca Montserrat Martínez, adjunta a la Dirección de Enfermería. De los 9.312 profesionales que trabajan a Vall d’Hebron, un total de 3.125 son enfermeras. En el Día Mundial de la Enfermería, se conmemora el nacimiento de Florence Nightingale (Florencia, 1820 - Londres, 1910), considerada madre de la enfermería moderna al hacer valer la importancia de las curas. Para celebrar el Día Mundial de la Enfermería, Vall d’Hebron ha hecho un cartel con los mensajes de apoyo y agradecimiento que la ciudadanía ha hecho llegar a las enfermeras. Mensajes como este: “Sois imprescindibles y vuestra sonrisa ayuda al hecho que todo sea más fácil de soportar. Muchas gracias”.