26/01/2012 Un estudio internacional con participación del Vall d'Hebron revela mutaciones de RAS asociadas a los inhibidores de BRAF 26/01/2012 El tratamiento del melanoma con inhibidores de BRAF ha conseguido grandes éxitos pero ha tenido como efecto no deseado el desarrollo de tumores secundarios, carcinomas escamosos bien diferenciados y queratoacantomas. Un estudio internacional revela la alta frecuencia de mutaciones de RAS en este tipo de neoplasias cutáneas secundarias a tratamiento anti-melanoma.Las mutaciones de RAS, especialmente HRAS, son frecuentes en los carcinomas cutáneos de células escamosas y los queratoacantomas que desarrollan muchos pacientes tratados con inhibidores de BRAF, según un estudio que publica The New England Journal of Medicine y en el que participaron antiguos residentes del Hospital Universitari Vall d'Hebron del servicio de oncología, como el Dr. Antoni Ribas, actualmente en la Universidad de California, y del servicio de dermatología dirigido por el Dr. Vicente García Patos , como la Dra. Amaya Virós, ahora en el Institute of Cancer Research de Londres.Como explica la Dra. Virós, "observamos en los ensayos clínicos que los pacientes desarrollaban carcinomas escamosos y queratoacantomas, tumores epidérmicos que pueden tener una mutación RAS". Los inhibidores de BRAF pueden, en presencia de una mutación RAS, inhibir las células que dependen del oncogen BRAF (melanoma) pero paradójicamente pueden activar las células que dependan del oncogen RAS (carcinomas escamosos y queratoacantomas). Los autores tomaron "muestras humanas de escamosos y queratoacantomas del ensayo clínico de Roche donde se trataron enfermos de melanoma con inhibidores de BRAF que desarrollaron tumores escamosos, se secuenciaron y se comprobó que tenían mutaciones RAS en un alto porcentaje", asegura la Dra. Virós.Para demostrar que esta segunda neoplasia surgía como efecto secundario de estos nuevos fármacos, compararon ratones donde se indujeron tumores escamosos expuestos a la droga inhibidora de BRAF a una cohorte similar no expuesta al fármaco. Los ratones expuestos a la droga desarrollaron tumores mucho antes que los ratones no tratados con droga, reproduciendo los efectos que se observaron en humanos. Se utilizaron combinaciones de drogas en este modelo de ratón para delinear una estrategia terapéutica que pudiera remediar este efecto secundario. En ratones que se trataron con inhibidores de BRAF y una droga inhibidora de MEK, otro oncogen activador del melanoma, se pudo evitar el desarrollo de neoplasias escamosas. Este resultado representa una evidencia in vivo de que esta combinación de fármacos podría ser ventajosa para enfermos de melanoma metastásico con una mutación de BRAF. El tratamiento del melanoma con inhibidores de BRAF ha conseguido grandes éxitos pero ha tenido como efecto no deseado el desarrollo de tumores secundarios, carcinomas escamosos bien diferenciados y queratoacantomas. Un estudio internacional revela la alta frecuencia de mutaciones de RAS en este tipo de neoplasias cutáneas secundarias a tratamiento anti-melanoma.Las mutaciones de RAS, especialmente HRAS, son frecuentes en los carcinomas cutáneos de células escamosas y los queratoacantomas que desarrollan muchos pacientes tratados con inhibidores de BRAF, según un estudio que publica The New England Journal of Medicine y en el que participaron antiguos residentes del Hospital Universitari Vall d'Hebron del servicio de oncología, como el Dr. Antoni Ribas, actualmente en la Universidad de California, y del servicio de dermatología dirigido por el Dr. Vicente García Patos , como la Dra. Amaya Virós, ahora en el Institute of Cancer Research de Londres.Como explica la Dra. Virós, "observamos en los ensayos clínicos que los pacientes desarrollaban carcinomas escamosos y queratoacantomas, tumores epidérmicos que pueden tener una mutación RAS". Los inhibidores de BRAF pueden, en presencia de una mutación RAS, inhibir las células que dependen del oncogen BRAF (melanoma) pero paradójicamente pueden activar las células que dependan del oncogen RAS (carcinomas escamosos y queratoacantomas). Los autores tomaron "muestras humanas de escamosos y queratoacantomas del ensayo clínico de Roche donde se trataron enfermos de melanoma con inhibidores de BRAF que desarrollaron tumores escamosos, se secuenciaron y se comprobó que tenían mutaciones RAS en un alto porcentaje", asegura la Dra. Virós.Para demostrar que esta segunda neoplasia surgía como efecto secundario de estos nuevos fármacos, compararon ratones donde se indujeron tumores escamosos expuestos a la droga inhibidora de BRAF a una cohorte similar no expuesta al fármaco. Los ratones expuestos a la droga desarrollaron tumores mucho antes que los ratones no tratados con droga, reproduciendo los efectos que se observaron en humanos. Se utilizaron combinaciones de drogas en este modelo de ratón para delinear una estrategia terapéutica que pudiera remediar este efecto secundario. En ratones que se trataron con inhibidores de BRAF y una droga inhibidora de MEK, otro oncogen activador del melanoma, se pudo evitar el desarrollo de neoplasias escamosas. Este resultado representa una evidencia in vivo de que esta combinación de fármacos podría ser ventajosa para enfermos de melanoma metastásico con una mutación de BRAF. Twitter LinkedIn Facebook Whatsapp