Entre el 27 y 30 de noviembre ha tenido lugar el Congreso Nacional de GeSIDA 2022, celebrado en Sitges y que ha reunido a expertos que investigan en el campo de la lucha contra el SIDA. En esta ocasión, la Dra. María José Buzón, corresponsable del grupo de Enfermedades Infecciosas del Vall d’Hebron Instituto de Investigación (VHIR), ha sido la copresidenta para la organización de las sesiones que incorporan los avances y conocimientos generados en el área de la infección por VIH.

A lo largo de la semana se han presentado numerosos proyectos de investigación básica y clínica, entre los que se encuentran investigadores del grupo de Enfermedades Infecciosas del VHIR.

En el campo de la investigación básica, Ana Gallego ha presentado un póster oral centrado en el desarrollo de un modelo de explante intestinal para estudiar estrategias dirigidas a reservorios del VIH. La creación de estos modelos es importante por la falta de muestras de personas con VIH y para ello se han usado explantes de donantes no infectados. Este sistema será útil para evaluar el impacto de la infección en el sistema inmunitario, la identificación del reservorio celular del VIH y de la acción de agentes para reactivar el VIH latente y favorecer la eliminación del virus mediante fármacos o el propio sistema inmunitario. El estudio ha sido financiado por la Fundación La Caixa y dirigido por la Dra. Buzón.

En un póster oral, David Perea, estudiante predoctoral del grupo de la Dra. Buzón, ha expuesto los resultados de su trabajo de caracterización de las células Natural Killer (NK) residentes en tejidos habitualmente implicados en la persistencia del VIH, como el de las amígdalas o el intestino. La investigación, financiada por el Ministerio de Ciencia e Innovación, muestra que cada tejido presenta subtipos y distribuciones distintas de estas células y que, además, pueden tener un rol importante en el control del VIH en el tejido linfoide. Por lo tanto, estrategias relacionadas con la expansión de las NK podrían ser útiles para el desarrollo de terapias dirigidas en los tejidos principales de persistencia de VIH.

En el póster temático de Nerea Sánchez, estudiante predoctoral del grupo de la Dra. Buzón, se resume el trabajo realizado en relación con la pérdida de control de los controladores de élite, es decir, personas que controlan de forma espontánea la infección, pero pierden esta capacidad. En concreto, los investigadores han identificado cambios en las células NK que podrían relacionarse con esta pérdida de control. Entender los mecanismos por los cuales esto sucede puede ser relevante para el desarrollo de nuevas terapias.

El proyecto de Cristina Mancebo, presentado en formato póster, ha estudiado biomarcadores inmunológicos asociados con la displasia anal en personas que viven con VIH. La detección temprana de las lesiones anales es esencial para evitar el desarrollo del cáncer anal. En el trabajo se ha comprobado que existe un ambiente inmunológico complejo en estas lesiones y que la infiltración de neutrófilos podría ser un biomarcador asociado al grado de displasia. Este estudio ha sido dirigido por el Dr. Joaquín Burgos y la Dra. Meritxell Genescà.

El Dr. Daan Pieren ha presentado un póster oral con el estudio de los mecanismos por los cuales una infección de transmisión sexual primaria aumenta el riesgo de infección por VIH posterior. El trabajo muestra que un tipo de células mieloides inmaduras puede tener un efecto supresor sobre el sistema inmunitario ante una infección primaria. Para este trabajo, dirigido por la Dra. Genescà gracias a una subvención de la Marató de TV3, la colaboración con personal médico de Drassanes-Vall d’Hebron ha sido esencial para obtener muestras de pacientes. 

Por parte de la investigación clínica, el trabajo expuesto por la Dra. Patricia Álvarez analizó el número de nuevos diagnósticos de VIH, el estadio de la infección al diagnóstico y el tiempo hasta la atención especializada y el inicio del tratamiento. Se observó que los centros especializados en atención a infecciones de transmisión sexual como Drassanes-Vall d’Hebron son fundamentales para el diagnóstico de VIH, ya que permiten detectar un mayor número de pacientes y de forma más precoz en comparación a otros centros.

La Dra. Álvarez también presentó los resultados de un trabajo donde se analizaron las características de los pacientes con uretritis por Mycoplasma genitalium y los porcentajes de curación con azitromicina y moxifloxacino. Mediante el estudio de más de 500 pacientes atendidos en Drassanes-Vall d’Hebron, se constató una elevada tasa de fracaso al administrar azitromicina en hombres que tenían sexo con hombres por tener una infección resistente a este tratamiento. Por ello, recomiendan plantear moxifloxacino como primera línea de tratamiento.

Por otro lado, la Dra. Paula Suanzes describió en su presentación las características de una cohorte de pacientes con infección aguda por VIH y la evaluación de la recuperación inmunológica y la supresión del virus tras iniciar el tratamiento antirretroviral. El trabajo confirmó que la recuperación inmunológica es mejor cuanto antes se inicia la terapia.

En un segundo trabajo, la Dra. Suanzes también mostró los resultados de un ensayo clínico sobre enfermedad causada por citomegalovirus (CMV) en pacientes con infección por VIH avanzada. Se comprobó que, aunque la incidencia de enfermedad causada por CMV en pacientes con VIH es baja, el nivel de CMV en sangre se asocia a un mayor grado de inmunosupresión.

Finalmente, en un proyecto presentado por el Dr. Vicente Descalzo, se describieron las características clínicas y epidemiológicas de pacientes con una primera infección por VIH en Drassanes-Vall d’Hebron después de la implementación de la profilaxis preexposición (PrEP). Se vio que uno de cada tres nuevos diagnósticos fue una primera infección y casi la mitad de ellos se dieron en una visita del programa PrEP y permitió el inicio rápido de la terapia antirretroviral.