11/10/2022 Vall d’Hebron identifica una nueva diana terapéutica para el lupus eritematoso cutáneo < > 11/10/2022 Las lesiones presentan niveles bajos de miR-885-5p, y esto incrementa la proliferación de los queratinocitos, la atracción de células inflamatorias y también la producción de mediadores inflamatorios. El lupus eritematoso cutáneo (LEC) es una enfermedad autoinmunitaria caracterizada por la presencia de enrojecimiento, descamación y atrofia de la piel, especialmente ante la luz del sol. A diferencia del lupus eritematoso sistémico (LES), en el que existen manifestaciones en diferentes órganos, las lesiones que aparecen en el LEC aparecen únicamente en la piel. Actualmente, los mecanismos biológicos por los cuales se produce el LEC no se conocen con profundidad. Con el objetivo de profundizar en el conocimiento de esta enfermedad, un estudio liderado por el grupo de investigación en Reumatología del Vall d’Hebron Instituto de Investigación (VHIR) (Dra. Josefina Cortés-Hernández, Dra. Cristina Solé), en colaboración con los Servicios de Dermatología (Dra. Gloria Aparicio) y de Anatomía Patológica (Dra. Berta Ferrer y Teresa Moliné) del Hospital Universitario Vall d’Hebron, ha identificado una nueva diana terapéutica. El trabajo ha sido publicado en Journal of Investigative Dermatology, una de las revistas más prestigiosas en dermatología. El trabajo se basa en estudios previos que mostraban que los niveles de microRNA miR-885-5p se encuentran reducidos en las lesiones cutáneas en el LEC. Los microRNA son pequeñas moléculas que se encargan de regular múltiples genes. Aunque se sabe que miR-885-5p tiene un papel importante en el desarrollo y fisiología de la piel y la cura de heridas, se desconoce su papel en la aparición de las lesiones. “Ahora hemos querido verificar la expresión anómala de miR-885-5p en LEC y descifrar los mecanismos moleculares que se relacionan con el desarrollo de la enfermedad”, afirma la Dra. Cristina Solé, investigadora de la Unidad de Lupus, en el grupo de Reumatología del VHIR. Para hacerlo, se estudiaron las células obtenidas de biopsias de 20 pacientes de LEC y 20 personas sanas. “Hemos observado que los queratinocitos (las células principales de la piel) de pacientes con LEC tienen niveles más bajos de miR-885-5p, y esto incrementa su proliferación, la atracción de células linfocitarias y también la producción de mediadores inflamatorios”, explica la Dra. Josefina Cortés, jefa de la Unidad de Lupus, en el grupo de Reumatología del VHIR. Los niveles de miR-885-5p disminuyen, por ejemplo, con luz ultravioleta B (UVB) y con la presencia de citocinas inflamatorias, como interferones de tipo I. Las autoras del trabajo investigaron también los mecanismos moleculares implicados en las lesiones. En este sentido, determinaron que la bajada en los niveles de miR-885-5p lleva a la inflamación de la piel mediante el factor NF-κB. Además, hace aumentar el factor PSMB5, lo cual es relaciona con el aumento de la proliferación de los queratinocitos. Por otro lado, la inhibición de miR-885-5p aumenta la capacidad de las células de la piel de atraer células inflamatorias a través de TRAF1. “Los datos sugieren que miR-885-5p sería una potencial diana terapéutica para el tratamiento del lupus eritematoso cutáneo, ya que disminuiría la inflamación que caracteriza las lesiones”, concluyen las investigadoras. Un mismo microRNA, sin embargo, puede regular varios genes al mismo tiempo, por lo que, en futuros estudios, será necesario identificar la mejor forma de administración para incrementar la especificidad del tratamiento y encontrar la mejor eficacia y minimizar los efectos secundarios. miR-885-5p sería una potencial diana terapéutica para el tratamiento del lupus eritematoso cutáneo, ya que disminuiría la inflamación que caracteriza las lesiones. Twitter LinkedIn Facebook Whatsapp